Accedemos a la casa desde una gran puerta restaurada y entramos en un gran hall abovedado que lleva al amplio salón comedor de techos altos, con chimenea y gran ventanal con vistas al jardín. Contigua al salón, la cocina, de estilo mediterránea, totalmente equipada con electrodomésticos de alta gama, tiene también acceso directo al jardín y a la pérgola donde poder comer y cenar durante casi todo el año.

En la planta superior, en la que se ha conservado el suelo de toba catalana original, encontramos 4 habitaciones dobles, dos de ellas con acceso directo a una amplia terraza de 23m2 con agradables vistas al jardín ambas comparten un amplio distribuidor y un baño completo.
En una zona contigua nos encontramos con las otras dos habitaciones, cada una con su baño propio. Todas las habitaciones disponen de armarios empotrados de obra.

El jardín de 185m2, con una agradable alberca y un pérgola, hace de la zona exterior disfrutable tanto en verano como en invierno. Desde este jardín accedemos a una sala polivalente independiente de la casa principal, con techos altos, que puede convertirse en despacho, sala de juegos o una quinta habitación.

Cabe destacar la reforma de buen gusto que se ha realizado recientemente en esta casa que data del año 1900, respetando los elementos originales, en el que se conservan las paredes de piedra, buena parte de las puertas y ventanas restauradas, así como el suelo de toba catalana, las arcadas y las escaleras. En este proyecto se ha maximizado la entrada de luz natural, con el diseño de grandes ventanales que dan al jardín y claraboyas en las escaleras.

La casa dispone de zona de aguas independiente y de un garaje , ambos en la planta baja de la vivienda, así como de Aire Acondicionado en las habitaciones, calefacción eléctrica, sistema de alarma y wifi de banda ancha.
Dispone de una plaza de aparcamiento extra en un parking cercano.

Situada en una calle tranquila, con mucho encanto y a pocos minutos del centro del pueblo, donde disfrutar del mercado el fin de semana, con pequeños comercios de alimentación, así como una buena oferta gastronómica de pequeños bares y restaurantes.

La ubicación es inmejorable, a tan solo 5 minutos en coche de las playas de Calella y Llafranc a 10 minutos de Begur y Tamariu y a 15 del Puerto deportivo de Palamós.